MLS EDUCATIONAL RESEARCH

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ISSN: 2603-5820

Educational Research Journal 2017, Vol 1 n. 1;
DOI: 10.29314/mlser.v1i1.14

INFLUENCIA DE LA AUTOESTIMA EN NIÑOS DE 6º DE PRIMARIA SEGÚN LA VARIABLE GÉNERO

Margarita Alcaide Risoto, Pilar Aguilar López, Nuria Cantero Rodríguez

Universidad Camilo José Cela/CEIP Pinar de San José/CEIP Navas de Tolosa
Fecha de recepción: 10 julio 2017 / Fecha de revisión: 27 julio 2017 / Fecha de aceptación: 12 diciembre 2017

Resumen:

Con la elaboración de este trabajo se pretende dar una visión de la importancia que tiene la autoestima en el desarrollo de las personas y cómo ésta influye en todos los aspectos. Así se ha realizado un recorrido por el concepto, los tipos qué podemos encontrar, qué aspectos influyen en ella, cómo podemos mejorarla, su influencia en el aula y qué papel juega el maestro en la autoestima de sus alumnos. El fin de este trabajo es comprobar la influencia que tiene la autoestima en el rendimiento escolar de los niños, hasta qué grado puede influir en el aprendizaje la personalidad de cada individuo y el papel que tiene el maestro en la construcción y mejora de ésta. El estudio se realizó con una muestra de cincuenta alumnos de sexto curso de Educación Primaria de un colegio de Madrid capital. El instrumento utilizado fue el cuestionario de Autoconcepto AF-5 que contiene una batería de treinta preguntas y evalúa cinco dimensiones (Académico/Laboral, Social, Emocional, Familiar y Física). El tipo de metodología es cuantitativa, descriptiva no experimental. Las conclusiones más importantes a las que se llegaron fueron que la autoestima influye en el rendimiento escolar del niño, padres y profesores juegan un papel fundamental en el desarrollo de ésta y los maestros deben potenciar las cualidades positivas de sus alumnos para desarrollar una autoestima positiva que les permita crecer como personas completas y felices.
Palabras clave:: Autoestima, autoconcepto, rendimiento académico, género.

Introducción

En un mundo cada vez más competitivo e individualista es de suma importancia conocer la influencia que posee la autoestima en el aula. Para ello, desde edades tempranas es muy importante que los se eduquen y motivemos al alumnado para que a pesar de no ser perfectos y no destaquen en sus actividades diarias, sepan que son únicos y por ello deben quererse a sí mismos y estimarse desde que son pequeños.

Por todo ello, padres, educadores y maestros jugamos un papel fundamental en el desarrollo de la autoestima de los niños.

Cuando un niño se estima lo necesario, está motivado con las actividades que realiza y no tiene miedo a equivocarse porque sabe que forma parte de su aprendizaje, este será un alumno con buena autoestima preparado para superar cualquier reto que se le presente día a día.

Por ello, hay que conseguir en la medida de lo posible que todos nuestros alumnos se estimen lo suficiente y para ello será necesario conocerles bien y dejarles que se expresen libremente para así no hacer falsos juicios de valor y caer en el famoso efecto Pygmalión.

En la actualidad, los niños cada vez pasan más tiempo en la escuela, por lo que los maestros tenemos un papel muy importante ya que no solo somos meros transmisores de información sino que también tenemos un papel fundamental en la educación de los sentimientos de nuestros alumnos.

Los sentimientos que los niños tienen hacia sí mismos, son creados a partir de las relaciones que establecen con los demás y los mensajes que le son transmitidos en diferentes situaciones que se le va presentando en su día a día, influyendo en su aprendizaje escolar en mayor o en menor medida. Los problemas personales de los alumnos también influirán de manera negativa en sus procesos de aprendizaje, por lo que es muy importante, la constante comunicación entre el profesorado y las familias.

La autoestima

Dependiendo del autor o las fuentes de información encontraremos diferentes definiciones para referirnos al concepto de autoestima:

“Una autoestima positiva es el requisito fundamental para una vida plena”. (Branden, 1991, p. 9).

La autoestima es el conjunto de la confianza y respeto que sentimos sobre nosotros mismos y muestra nuestros juicios de valor que hacemos hacia nuestra persona para afrontar los desafíos de cada día.

También García; Cermeño y Fernández (1991, p.10) la definen como “la forma habitual de percibirnos, de pensar, de sentir y de comportarnos con nosotros mismos. Es la disposición habitual con la que nos enfrentamos con nosotros mismos y evaluamos nuestra propia identidad”.

Así pues, la autoestima hace referencia a una actitud hacia uno mismo, generada en la interacción con los otros, que comprende la percepción, estima y concepto que cada uno tiene de sí mismo; e implica un adecuado desarrollo del proceso de identidad, del conocimiento y valoración de sí mismo, del sentido de seguridad y de pertenencia, del dominio de ciertas habilidades de comunicación social y familiar y del sentimiento de ser útil y valiosos para los otros.

“La autoestima constituye el núcleo básico de la personalidad”. (Rogers, 1994. p 11)

“La autoestima influye en la autorregulación de la conducta, mediando en la toma de decisiones, influyendo en la elección de objetivos y en el establecimiento de planes de actuación”. (Markus y Kunda, 1986, p. 11).

La autoestima es la valoración que cada persona tiene de sí misma, es nuestra propia valoración o juicio que hacemos de nuestra formar de ser, de nuestras acciones, de nuestros rasgos psicológicos y físicos. Todas estas características determinan nuestras vidas.

Factores que influyen en la autoestima

Influencia de la familia

Las influencias externas que recibimos desde pequeños son esenciales para la construcción de una autoestima adecuada. Los datos demuestran que en situaciones de violencia doméstica tanto víctima como agresor poseían bajos niveles de autoestima.

Existen familias, maestros y otros agentes que desprecian al niño, lo humillan, se ríen de él cuando necesita ayuda, se encuentra mal, siente miedo etc. Estas actuaciones se contrarrestan con otras opuestas como hacerle sentir querido, inteligente, bueno provocándole al niño gran confusión, influenciando negativamente, en su desarrollo.

Las personas que reciben este tipo de educación, cuando llegan a ser adultos, trasmitirán este mismo mensaje a personas más vulnerables tanto física como psicológicamente. La violencia más extendida es la emocional, los niños que sufren este tipo de intimidaciones a menudo se sienten frustrados, sufriendo en silencio sin compartirlo con nadie.

Es por este motivo que de manera inconsciente las familias dañan la autoestima del individuo. El problema se encuentra en que fueron educados de esta forma y siguen el mismo patrón.

Influencia de la comunicación

La comunicación tiene una fuerte relación con la autoestima, según como se diga una información tendrá un efecto negativo o positivo. Imponer una idea a los demás con el fin de lograr algo, dominar una situación o las personas es lo más común en personas violentas las cuales tienen un grave problema de comunicación.

Influencia de la sociedad

La sociedad en la que vivimos tiene un papel muy importante en la formación de las personas, ya que a partir de la cultura, las familias adoptan diferentes formas para trasmitirla a sus miembros e influyen en la personalidad, de acuerdo con unos modelos sociales. La imagen se construye de fuera hacia dentro, desde lo que piensan de nosotros los que nos rodean. Esto provoca que personas que tienen una alta posición social tenga una baja autoestima. Los estándares en que se basan las personas para evaluarse así mismas son culturales y están establecidos por modelos sociales que determinan nuestra imagen hacia los demás.

Influencia de la escuela

Es esencial que los maestros tengan claro que valores quieren transmitir a sus alumnos y si son capaces de transmitirlos.

El maestro puede beneficiar o perjudicar al alumnado a la hora de encontrarse a sí mismo como persona. Por ello, es esencial que nuestros alumnos se encuentren bien consigo mismos.

El fracaso escolar contribuye a desfavorecer la autoestima. Los maestros deben conocer en qué momento del desarrollo se encuentra cada uno de sus alumnos para adaptarse a ellos y contribuir a su formación académica y profesional.

Hay que tener en cuenta que cada alumno tiene una imagen en su mente tridimensional:

  • La primera dimensión es la imagen que tiene de sí mismo.
  • La segunda dimensión es la opinión que tiene de sí mismo en relación con la de los demás.
  • La tercera dimensión es la imagen que tiene de sí mismo y como le gustaría ser.

Por ello es primordial que el tiempo que los alumnos pasen en la escuela aprendan les contribuya en aprender quién quieren ser de acuerdo a sus características.

Para ser un buen maestro hay que tener en cuenta:

  • Crear un ambiente en el aula donde el alumno se encuentre a gusto y se sienta útil.
  • Reconocer y valorar los puntos fuertes de cada alumno.
  • Ser conscientes de los sentimientos que les crea al alumnado acudir a la escuela.

El papel del maestro en la autoestima

Es esencial que desde pequeños eduquemos los sentimientos.

En la actualidad los maestros no solo son unos meros transmisores de información sino que también tienen un papel fundamental en la educación de los sentimientos.

Los sentimientos que tenga el niño hacia sí mismo influirán en su aprendizaje escolar. Los problemas personales de los niños que no son resueltos influyen de manera negativa en sus aprendizajes

El profesor se convierte en un referente clave durante toda la escolarización del niño. Proporcionándole al alumno un ambiente de aprendizaje adaptado a sus capacidades. Por lo tanto, es fundamental que los padres tengan una estrecha relación con el profesor sobre el proceso educativo del niño, marcando unas pautas de acción común.

Las expectativas que tiene el profesor sobre el alumnado son esenciales para el fortalecimiento de la autoestima del alumno. El maestro que no confía en el alumno apenas le dotara de oportunidades para demostrar sus destrezas, lo que contribuirá a que siga siendo mal estudiante. Pasando lo contrario con el alumno en el que deposita su confianza y le motiva, el cual su desarrollo será pleno.

De aquí la importancia de conocer el profesorado y construir una imagen positiva del alumno, haciendo que este se sienta aceptado.

Los aprendizajes sociales son aquellos aprendizajes que se dan dentro y fuera de la escuela, que proporcionan respeto a la persona y al resto, les ayuda a resolver conflictos y a convivir mejor con los demás.

Los maestros creen que los niños deben aceptarse a sí mismo y a los demás para que sus conocimientos sean más útiles y eficientes, además cuando esto es así, pueden enfrentarse a sus propias limitaciones y los conocimientos que adquieran tendrán mayor valor.

Tras diferentes entrevistas a más de cincuenta maestros, se concluyó que a medida que los niños se respetaban a sí mismos mejoraban sus capacidades y resultados académicos, en relación con su confianza adquirida.

Rodríguez Espinar (1986, p.28) afirma que en los procesos de enseñanza aprendizaje con gran incidencia en el rendimiento escolar, y que éste es susceptible de cambio y modificable, hasta cierto punto, por la acción educativa, podemos comprender el interés que en el ámbito pedagógico suscita el tema y las actitudes del profesor que ayudan a los alumnos a lograr un autoconcepto positivo y un elevado nivel de autoestima.

El concepto que forma la persona de su capacidad, la apreciación que tiene sobre sus cualidades y actitudes, es construida a partir de sus propias experiencias e interacción con los demás. En especial importancia, lo significativo para los alumnos lo que son sus profesores.

“Diversas investigaciones ponen de manifiesto que algunas conductas y actitudes del profesor inciden favorablemente en la autoestima de sus alumnos” (Machargo, 1991, p. 28).

Se desarrolla la autoestima, cuando promovemos la participación activa, la cooperación y un clima de confianza en el aula, en el que el protagonista es el alumno, pudiéndose expresar, e equivocarse sin ningún miedo.

Saura (1996) dice que sin pretender ser exhaustivos, exponemos a continuación una serie de actitudes y conductas por parte del profesor que, a nuestro juicio, resultan especialmente adecuadas para educar la autoestima de los alumnos:

  • Conocer y aceptar al alumno tal como es y tratarle como ser único, importante, digno de atención, con un respeto incondicional.
  • Llamarle por su nombre.
  • Elogiarle de forma realista, sin adulación, y poner de manifiesto ante los compañeros sus actitudes positivas.
  • Evitar comparaciones innecesarias.
  • Insistir más en las metas positivas a conseguir que en los defectos o fallos a corregir.
  • Ayudarle a encontrar satisfacción consigo mismo y a elogiarse interiormente y ante los demás cuando proceda.
  • Ofrecer, junto con las críticas, alternativas y valoración positiva.
  • No condenar cayendo en el catastrofismo, pues ello genera sentimientos de culpa.
  • Ser paciente tolerante y respetuoso con todos los alumnos.
  • Crear un ambiente de confianza y tranquilidad, exento de agresividad y hostilidad.
  • No utilizar como recurso el miedo que fomenta siempre, en mayor o menor grado, la inseguridad.
  • No ridiculizar jamás al alumno, pues ello incide a la timidez y a suscitar sentimientos de inferioridad.
  • Estimular, comprender, impulsar, animar y motivar, en la medida de lo posible.
  • Mostrarle solidaridad y empatía y no compasión o lástima.
  • Ayudar a los alumnos para que se planteen objetivos realistas y razonables.
  • Evaluar de forma realista, positiva y flexible, ayudándoles a que ellos mismos se autoevalúen de la misma forma.
  • Ser acogedor y dialogante.
  • Intentar que los alumnos estén, al menos moderadamente satisfechos consigo mismos, reconozcan sus cualidades y su buen trabajo, así como los de los demás.
  • Saber conjugar armónicamente comprensión y firmeza, paciencia y exigencia.

Los maestros deben estar atentos para descubrir las oportunidades que logran el automejoramiento del alumno dentro del grupo.

El maestro debe orientar al alumno hacia la madurez, que por él mismo tome sus propias decisiones de acuerdos con sus necesidades y capacidades.

Método

En el presente estudio se pretende determinar si los distintos componentes del autoconcepto académico, social, emocional, familiar y físico están relacionados con el rendimiento académico y cómo estos autoconceptos y el rendimiento se relacionan con otras variables como el género y la edad en los alumnos de sexto de Educación Primaria.

El estudio sigue el método descriptivo, realizando un análisis comparativo en base a los datos recogidos.

El objetivo general que se propone se complementa con los objetivos específicos que se enumeran a continuación.

Objetivo de la investigación

Comprobar la posible relación o grado de asociación entre las distintas dimensiones del autoconcepto académico, social, emocional, familiar y físico y la variable género en alumnos de 6º de Educación Primaria de un colegio público de la provincia de Madrid.

Hipótesis

En función de los objetivos planteados se formulan las siguientes hipótesis:

H1. El autoconcepto académico es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria.

H2. El autoconcepto social es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria.

H3. El autoconcepto emocional es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria.

H4. El autoconcepto familiar es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria.

H5. El autoconcepto físico es más alto en los niños que en las niñas de 6º de Primaria.

Población y muestra

La muestra de la investigación fue de 50 participantes de un Colegio Público de Educación Infantil y Primaria de Madrid capital, entre los que se encontraban 28 alumnos y 22 alumnas, los cuales comprendían unas edades de 11 y 13 años. Es considerable de vital importancia que en la muestra encontramos 19 alumnos que han repetido sexto de Educación Primaria, 17 niños y 2 niñas.

Técnicas e instrumentos

Para poder llevar a cabo la investigación se ha utilizado el cuestionario Autoconcepto Forma 5 (ver anexo 1) desarrollado por García y Musitu (2001). Este cuestionario mide cinco dimensiones básicas del autoconcepto en niños, adolescentes: académico, social, emocional, familiar y físico. Cada una de las dimensiones consta de 6 ítems. Los individuos deben de contestar utilizando una escala del 1 al 99 puntos, donde 1 es totalmente en desacuerdo y 99 es totalmente de acuerdo.

A continuación se definen las 5 dimensiones del autoconcepto:

Autoconcepto académico. Hace referencia a la percepción que el sujeto tiene de la calidad de su desempeño, como estudiante o como trabajador. Se centra en dos aspectos: el primero relativo al sentimiento que se genera en el estudiante o en el trabajador acerca de su actividad a través de sus profesores o superiores (buen alumno, buen trabajador...) y, el segundo, referido a cualidades concretas valoradas especialmente en ese contexto (inteligencia, hábito de trabajo...).

Autoconcepto social. Percepción que el individuo tiene de su competencia en las relaciones sociales. Abarca dos aspectos: uno referido a la red social del sujeto y a su facilidad o dificultad para mantenerla o ampliarla; otro, perteneciente a algunas cualidades importantes en las relaciones interpersonales (amigable y alegre).

Autoconcepto emocional. Es la captación que el sujeto tiene sobre su estado emocional y sus respuestas a situaciones específicas, con cierto grado de compromiso e implicación en su vida cotidiana. Permite diferenciar dos aspectos: el primero hace referencia a la percepción general sobre el propio estado emocional (me asusto con facilidad, estoy nervioso), y el segundo centrado en la autovaloración emocional en situaciones concretas (cuando me preguntan o me hablan) en las que la otra persona es de rango superior (profesor, jefe...).

Autoconcepto familiar. Es la percepción que tiene el sujeto de su implicación, participación e integración en el medio familiar. Esta dimensión abarca dos aspectos. El primero de ellos específicamente a la confianza y el afecto de los padres. El segundo relativo a cuatro variables de la familia y el hogar:

Autoconcepto físico. Hace referencia a la percepción que tiene el sujeto de su aspecto físico y de su condición física. Esta dimensión incluye dos aspectos complementarios. Uno referido a la práctica deportiva en la vertiente social, física y de habilidad. Otro relativo al aspecto físico.

Procedimiento

Acudimos al colegio para realizar la investigación, previamente con la autorización del equipo directivo. Realizamos el cuestionario F- 5, a los alumnos de las dos clases de sexto de Educación Primaria, a primera hora de la mañana.

Previamente a su realización, se llevó a cabo una breve explicación de cómo puntuar las diferentes frases de 0 a 99 puntos, para ello, se realizó el dibujo de un termómetro en la pizarra para que pudieran tener una idea de cómo valorar las frases del cuestionario de la forma más ajustada, se realizaron varios ejemplos de manera grupal, para asegurar que el instrumento era correctamente contestado de manera individual por parte del alumnado.

Resultados

Autoconcepto académico/laboral

En primera lugar, respecto a los resultados obtenidos una vez analizada la dimensión de autoconcepto académico laboral, destacamos que se encuentran diferencias importantes en el grupo y sexo (véase tablas 1 y 2 y gráfica 1). Como podemos observar los chicos y chicas del grupo de muestra siguen líneas paralelas en su autoconcepto académico, permitiendo analizar a la muestra en su conjunto comprobamos que el percentil más bajo es 6,2 y el percentil más alto 6,7 siendo la media total de la muestra de 6,45.

Si analizamos la muestra por género, podemos observar en las niñas que el percentil más bajo es 6,3 y el más alto 6,7 siendo la media de 6,55 respecto a los niños el percentil más bajo es 6,2 mientras que el más alto es 6,5 siendo la media de los niños de 6,35.

Tabla 1.

Percentil autoconcepto académico/laboral según el género

Autoconcepto académico Niñas Niños Grupos
6,7+ 6,5+ 6,7+
6,3 - 6,2 - 6,2 -
6,55 media 6,35 media 6,45 media

Nota: fuente propia

Tabla 2.

Porcentaje autoconcepto académico/laboral según el género

Autoconcepto académico Niñas Niños
+50% 74% 66%
-50% 26% 34%
Total 100% 100%

Nota: fuente propia


Figura 1. Autoconcepto académico/laboral

Tras el análisis del grupo de muestra de forma conjunta y por género podemos encontrar diferencias significativas entre niños y niñas. Podemos concluir que las niñas de la muestra tienen la media superior a la de los niños en el autoconcepto académico/laboral además en este grupo hay una diferencia considerable ya que hay un grupo numeroso de alumnos que repiten curso (17 niños y 2 niña).

Autoconcepto social

Respecto al análisis del grupo muestra del autoconcepto social encontramos diferencias significativas en el grupo y sexo (véase tabla 3 y 4 y gráfica 2). Como podemos observar los niños y niñas del grupo de muestra no siguen líneas paralelas en su autoconcepto social, permitiendo analizar a la muestra en su conjunto comprobamos que el percentil más bajo es 7,0 y el percentil más alto 7,26 siendo la media total de la muestra de 7,13.

Si analizamos la muestra por género, podemos observar en las niñas que el percentil más bajo es 7,1 y el más alto 7,22 Siendo la media de 7,16 Respecto a los niños el percentil más bajo es 7,0 mientras que el más alto es 7,26 siendo la media de los niños de 7,13.

Tabla 3.

Percentil autoconcepto social según el género

Autoconcepto social Niñas Niños Grupos
7,22+ 7,26+ 7,26+
7,1- 7,0- 7,0-
7,16 media 7,13 media 7,13 media

Nota: fuente propia

Tabla 4.

Porcentaje autoconcepto social según el género

Autoconcepto social Niñas Niños
+50% 89% 83%
-50% 11% 17%
Total 100% 100%

Nota: fuente propia


Figura 2. Autoconcepto social

Una vez realizado en análisis de nuestra muestra de manera conjunta y por género podemos observar que no hay diferencias relevantes entre niños y niñas. Podemos concluir que tanto niñas como niños su componente social es similar y constante y no se aprecia diferencias significativas relevantes.

Autoconcepto emocional

En primera lugar, respecto a los resultados obtenidos una vez analizada la dimensión de autoconcepto académico laboral, destacamos que se encuentran diferencias importantes en el grupo y sexo (véase tablas 1 y 2 y gráfica 1). Como podemos observar los chicos y chicas del grupo de muestra siguen líneas paralelas en su autoconcepto académico, permitiendo analizar a la muestra en su conjunto comprobamos que el percentil más bajo es 6,2 y el percentil más alto 6,7 siendo la media total de la muestra de 6,45.

Si analizamos la muestra por género, podemos observar en las niñas que el percentil más bajo es 6,3 y el más alto 6,7 siendo la media de 6,55 respecto a los niños el percentil más bajo es 6,2 mientras que el más alto es 6,5 siendo la media de los niños de 6,35.

Tabla 5.

Percentil autoconcepto emocional según el género

Autoconcepto emocional Niñas Niños Grupos
5,46+ 5,74+ 5,74+
4.65- 4.97- 4.75-
5,05 media 5,35 media 5,24 media

Nota: fuente propia

Tabla 6.

Porcentaje autoconcepto emocional según el género

Autoconcepto emocional Niñas Niños
+50% 79% 82%
-50% 21% 18%
Total 100% 100%

Nota: fuente propia


Figura 3. Autoconcepto emocional

Tras el análisis del grupo de muestra de forma conjunta y por género podemos observar diferencias significativas entre niños y niñas. Podemos concluir que los chicos de la muestra tienen la media superior a la de las niñas en el autoconcepto emocional.

Autoconcepto familiar

En cuanto a la relación del autoconcepto familiar, observamos que no hay diferencias significativas entre el grupo y el sexo (véase la tabla 4.0 y 4.1 y gráfica 4). Como podemos observar los resultados de chicos y chicas son paralelos en su autoconcepto familiar.

Si observamos la muestra de manera conjunta observamos que el percentil más bajo es 7,88 mientras que el percentil más alto es 8,22 siendo la media de la muestra de 8,05. Si realizamos el análisis por género comprobamos que el percentil más bajo de las niñas es 7,88 mientras que el más alto es 8,22 siendo la media de las niñas 8,05 respecto a los niños el percentil más bajo es 7,90 mientras que el más alto es 8,21 siendo la media de los niños de 8,05.

Tabla 7.

Percentil autoconcepto familiar según el género

Autoconcepto familiar Niñas Niños Grupos
8,22+ 8,21+ 8,22+
7,88- 7,90- 7,88-
8,05 media 8,05 media 8,05 media

Nota: fuente propia

Tabla 8.

Porcentaje autoconcepto familiar según el género

Autoconcepto familiar Niñas Niños
+50% 93% 92%
-50% 7% 8%
Total 100% 100%

Nota: fuente propia


Figura 4. Autoconcepto familiar

Después del análisis de los datos podemos comprobar que no hay grandes diferencias entre los dos sexos, en ambos el resultado es similar y continuo.

Autoconcepto físico

Finalmente, la relación del autoconcepto físico, podemos observar grandes diferencias entre ambos sexos (véase la tabla 5.0 y 5.1 y gráfica 5). Como podemos ver los resultados entre chicos y chicas son reveladores en su autoconcepto físico.

Al observar la muestra de manera global observamos que el percentil más bajo es 5,98 mientras el percentil más alto es 6, 20, siendo la media de 6,09. En cuanto análisis por género podemos observar que el percentil más bajo de las niñas es 5,98 mientras que el más alto es 6,12 siendo la media de las niñas de 6,05 respecto a los niños el percentil más bajo es 5,99 mientras que el más alto es 6,20 siendo la media de los niños de 6,09.

Tabla 9.

Percentil autoconcepto físico según el género

Autoconcepto físico Niñas Niños Grupos
6,12+ 6,20+ 5,98+
5,98- 5,99- 6,20-
6,05 media 6,09 media 6,09 media

Nota: fuente propia

Tabla 10.

Porcentaje autoconcepto físico según el género

Autoconcepto físico Niñas Niños
+50% 82% 87%
-50% 18% 13%
Total 100% 100%

Nota: fuente propia


Figura 5. Autoconcepto físico

Una vez realizado el análisis podemos concluir que hay grandes diferencias entre ambos sexos el grupo de niños se aprecia un mayor autoconcepto físico que en las niñas.

Discusión y Conclusiones

Tras el análisis realizado de los datos de los cincos aspectos del autoconcepto (Académico/Laboral, Social, Emocional, Familiar y Física), mediante la utilización del test de Autoconcepto AF-5 y centrándonos en el aspecto académico podemos realizar las siguientes conclusiones:

La personalidad del individuo también influye en su autoestima, si se trata de un individuo con una personalidad extrovertida, aunque tenga un bajo rendimiento académico no lo estimará como un aspecto negativo de su persona sino un aspecto que debe mejorar desde una visión positiva.

En cambio si se trata de un alumno más introvertido y tímido puede enfocar su bajo rendimiento académico en un aspecto negativo de su personalidad por lo que puede influir en su autoestima viéndose perjudicada.

Por todo ello, el maestro juega un papel fundamental en la autoestima de sus alumnos es esencial educar la autoestima de las personas desde pequeños, por lo que la escuela juega un papel primordial en este ámbito.

Cuando un alumno tiene una alta autoestima, está motivado y no tiene miedo al fracaso este aprende mejor y se enfrenta de manera optimista a los desafíos del día a día.

Muchos maestros han demostrado con sus experiencias que el conflicto de sentimientos impedía el aprendizaje y como cuando este se resolvió, aumento el aprendizaje del alumno de cierto modo.

Cuando un conflicto es resuelto, los niños llegan a aceptarse más a sí mismos y a los demás, pero esto no indica que se hayan resuelto todas las dificultades.

Por ello el maestro debe encontrar las estrategias necesarias para crear un clima en el aula de respeto y apoyo hacia los demás, para poder conocer mejor a su alumnado y sentirse valorado y respetado por el grupo sin que sus calificaciones influyan en esta visión global de la persona.

Los maestros tienen la gran responsabilidad de ayudar a los niños a aceptarse a sí mismo y a los demás. Pero el maestro no debe realizar esta labor solo, sino que cuenta con recursos como los propios niños, sus padres y personal cualificado.

Una vez realizado el estudio se llegó a las siguientes conclusiones:

H1. El autoconcepto académico es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria. Se confirma, este resultado coincide con el llevado a cabo por Gorostegui, E. y Dorr, A.

H2. El autoconcepto social es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria. Se confirma este resultado.

H3. El autoconcepto emocional es más alto en los niños que en las niñas de 6º de Primaria. Se confirma este resultado coincide con el llevado a cabo por Amezcua, J y Pichardo, M.

H4. El autoconcepto familiar es más alto en las niñas que en los niños de 6º de Primaria. Se confirma este resultado coincide con el llevado a cabo por Amezcua, J y Pichardo, M.

H5. El autoconcepto físico es más alto en los niños que en las niñas de 6º de Primaria. Se confirma este resultado coincide con el llevado a cabo por Amezcua, J y Pichardo, M.

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